Fútbol.- 21 años después, el Albacete desciende a Segunda B
Tras 21 años, el Albacete Balompié ha dicho adiós a la Liga de Fútbol Profesional. La derrota en el Carlos Belmonte ante el Numancia fue la puntilla de la temporada. De poco sirve hablar de los sucedido durante el partido. Mario Simón continuó realizando pruebas de cara a la próxima temporada. Alfredo en punta fue una de las grandes novedades en el once, al igual que la entrada de Perico en el lateral izquierdo.
Los chavales dieron la cara y en algunos minutos, principalmente del segundo tiempo tras lograr el tanto del empate, llegaron a realizar buen juego poniendo en jaque a un serio Numancia que llegó al Carlos Belmonte a asegurar su permanencia, y lo logró. Se adelantaron los sorianos en el primer tiempo con un gol de Del Pino en el minuto 28. El tanto fue neutralizado por Tato en el 74 tras una buena jugada entre Perico y Adriá. Pero Sunny anotó el tanto de la victoria del Numancia a diez minutos del final.
Tras pitar el árbitro el final, la tristeza se apoderó del Carlos Belmonte al tiempo que algunos aficionados mostraban su indignación con todo lo sucedido durante la temporada. Una negra y nefasta temporada que debe dar paso a un proyecto que permita que el Albacete vuelva a estar entre los mejores en el menor tiempo posible.
Mario Simón mira al futuro
La tristeza invadió el vestuario del Albacete, incluyendo al cuerpo técnico, y eso se notó cuando entró Mario Simón a la sala de prensa del Carlos Belmonte. Mirando a Mario Simón a la cara ya había poco que decir. El entrenador del Albacete estaba muy tocado, aunque como todo el mundo sabía, la materialización del descenso era cosa de días.
«Vamos a seguir trabajando pensando en el futuro del Albacete Balompié», afirmó en una de sus prmeras declaraciones. En este sentido quiso destacar el trabajo de algunos de los jóvenes de la cantera «que van a más. Se están formando y eso es importante para el club», destacó el técnico del Alba. «De aquí al final hay que ser profesionales», aseguró al tiempo que tuvo palabras para la afición: «Es normal que se quejen, pero hay que felicitarles por su comportamiento durante toda la temporada».
Por su parte, Juan Carlos Unzúe estaba satisfecho porque la victoria prácticamente asegura la permanencia de los sorianos en Segunda División B. Unzúe reconoció que la ilusión de los chavales del Alba se lo había puesto muy difícil, sobre todo tras el tanto del empate de Tato.