Partidazo el que se esperaba en el Municipal de la Virgen, y que cumplió las expectativas. Buen ambiente el que se vivía en las gradas; la tarde tenía todos los ingredientes para que se disfrutara de una gran tarde de fútbol. Y así fue, aunque muy pronto el Villarrobledo tuvo el primer susto. En el minuto 1, pase de Abraham entre líneas a Denis, que se planta delante de Javi López, que finalmente consiguió hacer una gran parada al tiro del jugador hellinero. Al Villarrobledo le costó coger el hilo del partido, por lo que en los primeros 25 minutos dominó el encuentro el Hellín, con un Pele que estuvo muy trabajador. Pero lo que vale en el fútbol son los goles, y el gol llegaría para el Villarrobledo tras un corner que botó el Hellín. El balón cayó en Vílchez, que levantó la cabeza y metió un pase de 40 metros a Kike Espinosa, que se plantó delante de Toni Bernal y con un tiro adelantaba al Villarrobledo en el marcador. Y aquí se acabó el Hellín.
A partir de ese momento y hasta el final de la primera parte, dominio total del Villarrobledo sobre todo, en el centro del campo con un gran Salva, que era dueño y señor todos los balones que pasaban por allí. Así acabaría la primera parte.
La segunda comenzaba con la sentencia del Villarrobledo. Falta lateral muy peligrosa para el Villarrobledo que finalmente culminó con un golazo de Carlos Pérez, imparable para el portero hellinero. Sentenciaba el Villarrobledo, pero al contrario de lo que sucedió en otros partidos, el equipo quería más y se le veía con esa confianza de querer hacer un partidazo, como así fue. El Villarrobledo pudo marcar en varias jugadas de Abengózar, que hizo que el portero del Hellín se luciera. Pero se veía que el tercer gol iba a llegar y así fue. Huete puso el balón al centro del área, donde apareció Javi Gómez, que marcó un golazo. El Municipal estalló en una fiesta al ver que su equipo bordaba el buen fútbol goleando a un equipo como el Hellín. Tras el tercer gol, el Villarrobledo seguía llegando con peligro a la portería contraria. Así, el minuto 86 falta lateral que pegaba Vílchez y que Toni Bernal paraba.
Y ya cuando la gente se levantaba para llegar a tiempo para ver el clasico, Salva marcaba de cabeza el gol que cerraba la tarde. Ése fue el punto y final del partido. Un encuentro que terminaba con una gran ovación de la afición y que fue correspondida por los jugadores desde el centro del campo. Hay que destacar el buen hacer de todos los jugadores del Villarrobledo, y del Hellín, su portero Toni Bernal, que evitó que su equipo se marchara con un 7-0 en el marcador. También hay que resaltar la figura de Pele.
Por el contrario, lo peor de la jornada, la lesión de Cubi y la expulsión del hellinero Abraham.
