Un mal bote de balón y una segunda tarjeta condicionaron el resultado entre el Manzanares C.F. y La Gineta

Aspectos puntuales te dan y te quitan en el futbol, esto ocurrio en el encuentro entre el Manzanares C.F. y La Gineta, un mal bote de balón le dio a Agus la oportunidad de empatar el encuentro. El otro condicionante lo marca un balón en juego, entre un rival y otro con balón por medio, primero el arbitro le enseña la amarilla a Raul Castillo y a continuación la roja y siendo honestos la tarjeta fue rigurosa y marco posteriormente el partido. Colegiado y asistentes, dieron un curso de como no se debe de pitar, con errores de bulto que no deben de permitirse en un partido de tercera división.

La Gineta de «Lin» dio una buena imagen en el «Jose Camacho», su salida fue con descaro y dejando claro que venían a competir por los puntos y que no iban a regalar nada. Comienzo de partido con alternativas, rompió hostilidades David Sevilla quien en el minuto dos de encuentro buscaba con intención la portería de Juanma, los visitantes respondían con un disparo de Fran Bueno en el minuto que se iba fuera por muy poco, Buitre dos minutos mas tarde ensayaba un disparo que se iba alto. Comienzo de encuentro con alternativas y con dominio alterno, dos equipos muy iguales y con necesidades de ganar peleaban con mucha garra y ponían todo lo que hay que ponerle a un partido de futbol, un equipo y otro dejaban claro que la competición es muy igualada y cualquiera le puede ganar a cualquiera.

Se llevaba un cuarto de hora de partido, cuando una mele dentro del área de La Gineta terminaba en gol, no atrapaba el portero visitante y Juanma muy atento establecia el 1-0. Con marcador a favor, los de Guillermo Alcazar se convirtieron en dominadores del encuentro, las ocasiones caian del lado manzanareño. Se disputaba el minuto veinticuatro, cuando Juan Pe ensayaba el disparo desde lejos y el esférico se iba alto, tres minutos mas tarde con el cronometro señalando el minuto veintisiete es Raul Castillo quien hace intervenir a Juanma con muchísimo acierto. El Manzanares estaba ofertando sus mejores minutos de la primera mitad, futbol basado en corazón porque el rival no les daba opción a otra cosa, en esta fase de partido es Roberto Santana quien lanza una falta y Juanma despeja con apuros.

El partido cambiaba de dinámica de un minuto a otro, nadie dominaba con claridad y el balón iba de una portería a otra, se disputaba el minuto treinta y cinco cuando Fran Bueno de cabeza obliga a Rodri a realizar un espectacular despeje y mandar el balón a corner. La Gineta quería empatar el partido, ofertando un juego colectivo brillante, era Agus quien en el minuto treinta y nueve mandaba el balón al lateral de la red de la portería de Rodri. Minutos de buen juego de La Gineta, cuando llego el gol del empate, el pésimo estado del césped del «Jose Camacho» le deja un balón a Agus delante de Rodri y el jugador visitante establece el empate a un gol.

En los últimos cuatro minutos de la primera mitad, ocurren muchas cosas, entre ellas un disparo de Santana que se fue alto por muy poco.  El aspecto mas importante del primer periodo, pasa en el minuto cuarenta y tres, balón en juego entre Raul Castillo y un defensor visitante, en esta jugada primero ve tarjeta amarilla Raul Castillo y a continuación la roja. ¿Condiciona el partido esta jugada?, si y sin duda, porque el delantero entro a un balón en juego y no causo daño y después vio la tarjeta roja, es seguro que le haría una observación al colegiado pero la pregunta vuelve a surgir, ¿ por una observación y habiendo enseñado amarilla es justo y lógico enseñar roja a continuación?.

Mas corazón que cabeza

En la segunda parte, obligación de ganar para el Manzanares y jugando con un hombre menos, obligación de no perder de La Gineta, condicionaron el desarrollo del segundo periodo. «Lin» técnico visitante, lo tuvo muy claro, defender lo conseguido y esperar una contra que matara el partido. Guillermo Alcazar, mando a los suyos al ataque, esto propiciaba errores y futbol demasiado directo en ocasiones, pero todo era lógico porque con un futbolista menos hacer encaje de bolillos hubiera sido de idiotas.

Las ocasiones caian del lado del Manzanares, los de La Gineta se defendían con acierto y se quitaban el balón del medio cuando el rival apretaba, pero las ocasiones de los franjiblancos llegaban en tiros desde fuera del área o en segundas jugada cuando había veinte futbolistas delante de la portería rival. Pirri en el minuto cuarenta y seis lo intentaba desde lejos y el balón lo atrapaba Juanma. Dominio territorial del Manzanares, era imposible hacerlo bonito porque el rival lo impedia, las ocasiones llegaban en jugadas puntuales y asi en el minuto cincuenta y ocho un disparo de Martin obliga a Juanma a realizar una gran parada. A perro flaco todo se le vuelven pulgas, los locales pierden a Santana por una rotura en el minuto cincuenta y ocho, otra vez a mover todo tácticamente para Guillermo Alcazar y a seguir peleando para sus jugadores.

En los minutos sesenta y siete y setenta, ocasiones de Moraga y Pirri que desbarata el meta visitante Juanma, los manzanareños ponían todo y realizaban el único futbol posible al jugar con un hombre menos y realizar un desgaste físico impresionante. La Gineta también tuvo sus oportunidades, los visitantes hicieron un trabajo defensivo espectacular, teniendo en el minuto setenta y cinco una oportunidad de Monteagudo que desbarato Rodri con una gran parada.

En los últimos diez minutos de partido, dos ocasiones mas para el Manzanares, un cabezazo de Jose Carlos en el minuto ochenta que desbarato Juanma con una gran intervención y finalizando el encuentro un disparo de Chule que se fue alto por muy poco.

La Gineta se llevo un punto, porque aprovecho bien su trabajo, los de «Lin» colectivamente dieron imagen de buen equipo, es evidente que el resultado es lo que al final manda y los visitantes se llevaron un punto basándolo en sus armas y haciendo un buen trabajo a nivel colectivo. El Manzanares tuvo ocasiones para ganar el partido, la mala suerte en el gol y una mas que rigurosa expulsión de Raul Castillo fueron detonantes del partido, pero nadie puede negarle a ningún futbolista su compromiso y su entrega durante los noventa minutos.