Muchas son las razones por las que el CD Pedroñeras no ha terminado de arrancar esta temporada y ocupa puestos de descenso, pero una de ellas prevalece por encima del resto, las jugadas a balón parado. De los 24 goles encajados por los ajeros, 11 han sido de pelota parada, una faceta en la que los de Sepúlveda sacaban rédito temporadas anteriores y ahora sufren sus consecuencias.
De córner, de falta lateral, de falta directa…el CD Pedroñeras ha visto como en la mayoría de sus partidos los rivales han utilizado la táctica para desarbolar la zaga. La sangría comenzó en la tercera jornada ante el Atlético Tomelloso. En un partido igualado sobre el verde, los tomelloseros aprovecharon una falta lateral para hacer el primer y único tanto del partido a merced de un cabezazo de Sousa.
En la jornada siguiente ante Quintanar del Rey sucedió lo mismo, un gol de córner privó al CD Pedroñeras de sumar un punto en un partido de poder a poder. Almansa, Almagro, Villarrobledo, Ciudad Real y Madridejos han sido los demás equipos que se han aprovechado de la fragilidad defensiva de los ajeros en la pelota parada.
Los penaltis están siendo también un quebradero de cabeza para el equipo conquense. Hasta en tres ocasiones ha señalado el colegiado el punto de penalti en el área del CD Pedroñeras durante esta temporada y en los tres lanzamientos el balón ha ido a la red.
La estadística de que casi un 50% de los goles encajados sean a balón parado no son buenos números para un equipo que aspira a salir del descenso. José Luis Sepúlveda y su cuerpo técnico deberán incidir en trabajar estas jugadas para evitar que se sigan encajando goles que luego cuesta tanto anotar.
